IronMan 70.3 South American Championship
Durante un fin de semana en donde el tiempo acompañó, 2500 atletas de 31 países pudieron competir, luego de prepararse todo el año, en la competencia de mayor prestigio a nivel mundial: el IronMan 70.3 South American Championship. El triatlón que combina 1.9 kilómetros de natación, 90 kilómetros de ciclismo y 21 kilómetros de pedestrismo, se realizó el pasado 5 de noviembre en la municipalidad de Tigre, en Nordelta.
El punto de partida se localizó en Puerto Canoas. Allí, los atletas se lanzaron al lago para dar comienzo a la fase de natación. El recorrido continuó con el circuito de ciclismo de 3 vueltas de 30 kilómetros. La primer parte se desarrolló dentro del complejo Nordelta, seguido por un tramo en Camino de los Remeros, y finalizó en Puerto Canoas. Por último, se llevó a cabo la etapa de pedestrismo en Nordelta y Bahía Grande, lugar donde sus familias, amigos y el público fanático esperaban a los participantes.
Los ganadores de esta tercera edición fueron: el norteamericano Rodolphe Von Berg en la categoría masculina, con un tiempo de 3 horas 46 minutos; y la brasileña Pamella Oliveira, en la femenina, con una marca de 4 horas 19 minutos. Además, compitieron reconocidas personalidades del deporte, la música, el periodismo y la televisión, dentro de la categoría “celebrities”.
Superación personal, pasión, y dedicación, son los principales motivos que rigen la decisión de vecinos y deportistas a participar en la competencia. Tal fue el caso de Lorena Fariña, vecina de Castores Nordelta y ganadora del segundo puesto de la categoría femenina 40-44. Luego de participar en varias competencias, el Ironman 140.6 de Sudáfrica, y tras varios meses de entrenamiento, la participante logró cumplir su objetivo y obtener una plaza para el Ironman World Championship Niza 2019, en Francia.
Lorena expresó el esfuerzo y el compromiso que conlleva participar de una de las carreras más exigentes del territorio latinoamericano. “Desde hace tres años que entreno y me sacrifico muchas horas por día, teniendo en cuenta que soy mamá, mujer, amiga y ama de casa. Nado y ando en bici cuatro veces a la semana y corro cinco o seis veces por semana y, algunos días, hago musculación”. Además, aseguró la necesidad de llevar una buena alimentación y de descansar de la mejor manera posible.
A pesar de atravesar momentos de miedo e incertidumbre, la atleta enfocó todas sus energías en cumplir dos objetivos: correr el Ironman World Championship 140.6 Kailua Kona y el triatlón Niza 2019. Para ello, fue necesario mucho esfuerzo y compromiso.
El 13 de octubre del 2018, Lorena cumplió su primera meta: Kailua Kona. “Hasta el día antes de la carrera me preguntaba… ¿y después de esto qué? Tenía miedo de que todo se haya dado muy rápido y no saber qué hacer después. Haber llegado a la cumbre del Triatlón en tan sólo 3 años de entrenamiento, me hace sentir que toque el cielo con las manos, que los sueños cuando se buscan y se persiguen se logran y que todo sacrificio valió la pena”, manifestó la participante.
Las dos semanas que le siguieron al campeonato, la atleta tuvo que dedicar horas a descansar para poder recuperarse de duros meses de entrenamiento. Su sueño se encontraba más cerca de lo esperado. Si bien deseaba clasificar, era consciente de que su cuerpo lo había dado todo y quería disfrutar de correr en su lugar: Nordelta. Tras una carrera que se definió por ser tranquila lo logró. Todos sus familiares, amigos y vecinos la esperaban en la meta con entusiasmo, sin imaginar el enorme significado que implicaba para ella poder compartir esta victoria con sus seres queridos. “Esta carrera fue muy importante para mí, tenía todo el apoyo de mis afectos y eso me hizo sentir feliz y fuerte”, expresó la participante.
Lorena, como representante de los vecinos de Nordelta, es un ejemplo cercano capaz de demostrar cómo mediante el esfuerzo y el sacrificio uno puede alcanzar sus objetivos. Es cuestión tiempo, dedicación y amor para encontrarse un paso más cerca de cumplir nuestros sueños. “Cada vez que salgo a correr, pienso que la competencia es contra mí mísma, busco superarme en cada una y hacer una mejor carrera que la anterior. El puesto es una consecuencia del trabajo que hago todos los días. Cada carrera es una enseñanza, siempre hay algo nuevo o una atleta mejor y que te hace sentir que aún tenés mucho más por dar y aprender. Todo el sacrificio vale la pena y haber logrado el segundo lugar para mí no tiene precio. Quería agradecer a cada una de las personas que me sigue y decirles que no importa la edad ni el tiempo, cuando hay un sueño todo es posible”.
Texto: Catalina Mirás