“Lo único que quiere es…” escribe Isabelle en una carta a su madre informándole sobre el desesperado estado en que su enfermo hermano se encuentra. Ese hombre moribundo que yace frente a ella pronto se convertiría en una de las más grandes figuras de la prosa y literatura de la época por sus trabajos de juventud. Sin embargo, al momento en que Isabelle escribe la carta a Vitalie, Arthur Rimbaud moriría como un comerciante ignoto. Lo que continúa en la carta de la afligida hermana nunca se conocerá, porque el resto del mensaje se habría de perder en el inevitable caos del pasar del tiempo. Más de 120 años después, un hombre parte desde Buenos Aires en una búsqueda por descifrar el misterio detrás del deseo final del poeta maldito. Un viaje que lo llevararía a través de todos los sitios que el poeta visitó en vida.
El autor de esta historia es Gustavo Giovagnoli, quien junto a su familia fue de los primeros en mudarse al barrio Los Castores en la ciudad pueblo. Es licenciado en Letras de la Universidad de Buenos Aires, docente, padre de familia. Todos los domingos se junta con el equipo de fútbol de Castores, participando de partidos de torneo y amistosos que tienen lugar en la cancha principal del barrio, y al terminar se reúne con sus amigos para disfrutar lo que resta del día con una comida y unos vasos de cerveza. “Escribo desde que tengo memoria”, nos cuenta Gustavo. “Al principio, igual que casi todos, empecé con la poesía, pero con el tiempo fui cambiando”. Destaca que en algún momento le interesó más que nada la investigación histórica. La casi inagotable fuente de material que hay entre los manuales de historia que, en cada girar de página, sorprende con hechos que parecen sacados de una novela. “Ni siquiera tenés que hacer ficción”, agrega. “La historia ya es tan rica y tan asombrosa… A veces es suficiente contar simplemente las cosas que pasaron desde un punto de vista”. En su última novela, logró fundir un punto intermedio entre este género y la ficción, creando un nuevo personaje que parte en un viaje por el mundo en busca del secreto de la carta perdida de Rimbaud.
“Me encontré con este material y tenía muchas ganas de contar la vida de Rimbaud, pero no podía escribir una biografía porque ya hay cientas sobre su historia y no tenía ningún sentido que me ponga a escribir yo sobre él, 120 años después, y sin posibilidades de hacer mucha más investigación de la que ya se hizo. Así que me puse a leer sobre esa carta, a ver qué es lo que podría haber detrás. Tratar de responder esa pregunta: ¿qué es lo único que quería Rimbaud?”, detalla. Y su nueva novela la encara entonces de esta forma, si bien no es una biografía del poeta, en la medida que el protagonista recorre los diferentes paraderos de Arthur, va reconstruyendo su vida intentando responder la interrogante que hizo despegar la investigación.
Arthur Rimbaud tuvo una vida de película, literalmente, su historia no sólo quedó retratada en biografías sino que también inspiró una versión cinematográfica con un muy joven Leonardo DiCaprio haciendo del poeta. Escapó aún adolecente de la casa materna en busca de un lugar en el mundo literario de Paris de la Belle Époque y fue apadrinado por un reconocido poeta de la ciudad. Desde entonces se embarcaría en aventuras que lo llevarían alrededor de Europa: en medio de una discusión recibió un disparo, se enlistó en la armada holandesa, viajó a África para vivir en el centro de lo que ahora es Etiopía, fue traficante de armas. “Muchas veces cuando contás la historia real tenés que detenerla un poco, porque la tensión que se genera, que es lo que te atrapa en una novela, llega a un punto que no podés creer. Con la vida de Rimbaud fue uno de esos casos. Su biografía es tan interesante que por momentos sentís que tenés que frenar. Sin embargo, todo lo que cuento sobre Rimbaud es real. Y eso es lo más asombroso”.
El libro que lanzó Gustavo este año por el momento no se puede encontrar impreso entre las librerías de Buenos Aires. A diferencia de sus publicaciones anteriores, la editora que adoptó este libro para realizar su producción y distribución es Alféizar, una editorial española que además de publicar la historia de Gustavo la consagró con una mención honorífica en el concurso que realiza cada año, donde se evalúan las nuevas novelas que llegan a sus manos. Sin embargo, si bien no se puede obtener físicamente en Argentina, “El secreto Rimbaud” sí está disponible para la compra a través de distribuidoras internacionales que pueden enviar el libro o mediante la adquisición de la versión digital para la lectura desde un dispositivo electrónico.
¿Qué es lo que le depara a este investigador? ¿Descubrirá el deseo final detrás de la carta de Isabelle? A diferencia del misterioso secreto Rimbaud, esta incógnita sólo tiene una forma de resolverse: leyendo el libro.
Por Pedro Canton Corbelle