No es la primera ni la última vez que suceda algo similar -incluso al autor de nuestro segundo recomendado del mes también le sucedió lo mismo al comienzo de su carrera-, pero lo cierto es que tras el éxito de Bajo la misma estrella recién ahora se publican en nuestro país las primeras novelas de John Green. Es el caso de Buscando a Alaska, libro editado originalmente en 2006. Miles es fanático de François Rabelais y guiado por la filosofía de vida de aquel escritor francés decide mudarse a Alabama para estudiar en Culver Creek. Con sus nuevos amigos, su recientemente descubierta libertad y un impulso para tomar las decisiones de su vida, pone su norte en descubrir los misterios de la enigmática Alaska, tierra fría de espíritus indomables. Sin embargo, nada será tan sencillo y el hecho de haber dejado su monótona vida atrás también tiene sus consecuencias. «Tenemos que vivir con la ambigüedad: a veces hay preguntas para las que necesitamos una respuesta, pero nunca la obtenemos. Escribí este libro porque quería saber si era posible reconciliarnos con esa ambigüedad, vivir con ella y no dejar que la ira y la tristeza ante la falta de respuestas se apoderen de nuestras vidas», aseguró Green.
La Herencia
Extraño titulo en español para Sycamore Row, en su original en inglés, cumple igualmente con la tradición de los títulos breves y poco informativos que caracteriza a la extensísima producción del abogado John Grisham. Esta nueva novela de corte legal -su especialidad, amén de intentos con dispar resultado en otros géneros- vendría a ser una continuación indirecta de su primer libro, Tiempo de matar. En el sureño pueblo de Clanton ya pasaron tres años desde que Jake Brigance defendió al padre de una niña negra violada que decidió tomar justicia por mano propia, pero la sociedad vuelve a estar dividida. Un millonario desconfiado decide terminar con su vida acosado por los fantasmas de una muerte dolorosa si deja avanzar el cáncer que lo está consumiendo. Escribe a mano su testamento, sabiendo que la bomba quedará latente: su ama de llaves será su heredera principal. Jake deberá defender los derechos de esta mujer discriminada por el color de su piel y en el camino descubrir por qué el hombre decidió ser tan generoso con ella.
Vida, estamos en paz
Cuánto conocemos realmente de China Zorrilla es lo que se preguntó el periodista uruguayo Diego Fischer, formado en las Universidades de Navarra y Boston, al momento de encarar este trabajo que intenta diferenciar las anécdotas reales de los trazos imaginativos con los cuales los adornaba la entrañable actriz que falleció hace pocos meses. Heredera del talento, la sensibilidad y la bonhomía de su abuelo poeta y de su padre escultor, China perteneció a la alta sociedad, podría haberse casado y formado un hogar tradicional, pero por el contrario eligió una profesión muy mal vista en su época y en su círculo social. El autor, corresponsal en Uruguay de la agencia de noticias United Press y colaborador del diario La Nación, tiene una mirada reveladora sobre una mujer que un día decidió dedicar su vida entera al arte y la filantropía. Es el retrato de una personalidad luminosa que, aún tras su muerte, sigue brillando con la misma intensidad que lo hizo a lo largo de sus noventa años.
Por Damián Serviddio